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Cuando nos encontramos en una situación financiera de alerta, la primera interrogante que viene a nuestra mente es: ¿Cómo lograr ponerme de pie después de un descalabro económico?
Todos estamos expuestos a sufrir alguna catástrofe económica al menos una vez en nuestra vida. En ocasiones es originada por combinación de circunstancias desafortunadas: como la acumulación de deudas, seguida por la pérdida de empleo y en otras, es detonada por un solo evento: como la enfermedad o el divorcio, pero ¿Como ponernos de pie?.
SIN SENTIMIENTOS DE CULPA
El primer paso es evitar a cualquier costa que tú y tu pareja almacenen sentimientos de culpa. Cualquiera que haya sido el error, sin dudarlo, ha dejado un gran aprendizaje. Recuerda que el “hubiera” no existe. Somos libres de elegir si caminamos hacia adelante o nos quedamos varados.
ABRE UNA NUEVA CUENTA DE CHEQUES
Si la viejita te deprime, apertura una nueva cuenta. Deja suficientes fondos en la antigüa que te sirvan para cubrir los cheques pendientes de pago, transfiere lo demás a la nueva y cierra la vieja y dale seguimiento por internet utilizando su banca en línea.
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ESTOY SIN TRABAJO
Para ayudar a tus finanzas a sobrevivir este “bache”, recuerda que debemos planear para el peor de los escenarios, pero siempre vislumbrando el mejor. Debemos prever que quizás estaremos un periodo largo sin empleo, pero inmediatamente debemos ocuparnos a buscar un nuevo empleo para reincorporarnos nuevamente a la vida laboral en el menor tiempo posible. Cuando esto sucede debemos:
- Recortar gastos innecesarios de tajo.
- Utilizar nuestros recursos económicos para cubrir los gastos básicos: alimentación, vivienda y transporte, servicios y pagos de deuda asegurada: auto e hipoteca, si los tenemos.
- Con lo que resta, pagar a nuestros acreedores.
DEUDA EXTREMA
Desafortunadamente, una enfermedad de algún familiar o una discapacidad repentina, pueden ponernos en aprietos y en una situación de deuda extrema: donde hemos alcanzado los límites de crédito, perdimos la capacidad de hacer pagos mínimos y empezamos a recibir llamadas de empresas de cobranza.
Mientras a algunas personas les causa un tremendo estrés a otras no les afecta en lo más mínimo. Pero independiente de tu estilo, hay dos realidades importantes:
- Mientras más nos tardemos en cubrirlas más intereses y cargos se originan.
- Afectan el historial crediticio y ello implica perder la libertad de obtener préstamos en el futuro.
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PREFERENCIAS DE PAGO
Lo más importante es empezar a cubrir las deudas de mayor interés y las deudas de honor, pues tu reputación y relación con el acreedor están en juego. Aunque este tenga una posición privilegiada en tu vida, por ser un familiar o un amigo, la obligación de pagar es la misma. Avísale regularmente sobre sus pagos y si es necesario retrasar alguno, pregunta si no hay inconveniente en hacerlo. Así mantendrás intacta tu red de aliados.
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TIPS DE ESPECIALISTAS:
- Conserva tu liquidez. No trates de liquidar tus deudas con el dinero de tu compensación , en caso de pérdida de empleo.
- Si tienes inversiones que puedes dejar de cubrir sin penalidades y que no estén destinadas para tu retiro, utilízalas para enfrentar compromisos.
- Si tienes deudas de tarjetas, cubre los pagos mínimos hasta que tengas ingreso fijo. Pero no aumentes tu nivel de deuda y evita pagar gastos con tarjeta de crédito.
- Los créditos para auto e hipoteca a veces incluyen seguro de desempleo. El cobro está incluido en las mensualidades, por lo que echa un vistazo a tu póliza.
Espero que con estos consejos y si te encuentras en cualquier estado de deuda, te sean de provecho para mantener unas finanzas saludables.
